Especies cultivadas
Ulva lactuca
También conocida como lechuga de mar, es una alga verde comestible que se encuentra en aguas costeras de todo el mundo. Tiene un gran interés para la industria de la alimentación y la nutracéutica debido a su alto contenido en proteínas, fibra, minerales (magnesio, calcio, hierro, zinc y manganeso) y vitaminas (A, B1, B9, C y E). Esta especie contiene una variedad de compuestos bioactivos, como polisacáridos, lípidos, aminoácidos y pigmentos, que se pueden utilizar para producir productos farmacéuticos y cosméticos.
Además, tiene un gran potencial de biorremediación, debido a su alta capacidad de absorción de nitratos y fosfatos y, por tanto, puede reducir la concentración de estas sustancias en el agua, haciendo que mejore la calidad del agua. Por ello, resulta el organismo más idóneo para cultivar junto con peces y bivalvos. En Algabrava hemos diseñado el primer protocolo para realizar su cultivo en mar abierto, anclando sus primeras fases en cuerdas. También disponemos en nuestras instalaciones de un semillero de esta especie, así como de un cultivo constante de adultos en nuestras instalaciones indoor.
Ulva intestinalis
Es una alga verde que se encuentra en aguas costeras templadas y tropicales. Esta alga es una fuente de alimento para muchos organismos marinos, como los moluscos, crustáceos y peces, y también se usa como alimento humano en algunas partes del mundo. Ulva intestinalis es una alga de crecimiento rápido que se puede cultivar en condiciones controladas con un bajo coste económico.
Esta alga se cultiva en una variedad de sistemas, tales como sistemas de cultivo en tanques y sistemas de cultivo en cuerdas en mar abierto, ya sea sola o asociada a cultivos multitróficos integrados. Es una alga con un alto contenido de nutrientes y una gran variedad de vitaminas, minerales, ácidos grasos esenciales y proteínas, lo que la hace una buena fuente de alimento para los humanos. En Algabrava tenemos los protocolos optimizados para su cultivo en tanques o para obtener reclutas en cuerdas, para su posterior cultivo en el mar.
Codium vermilara
Comúnmente conocida como “alga percebe”, es una especie que está ganando mucho interés en la alta cocina debido a su peculiar y excepcional sabor y textura. Además, posee un alto contenido en vitamina A, es rico en hierro y tiene una baja concentración de grasas. Es una especie que también se puede utilizar en cosmética, en concreto en cremas, debido a las propiedades hidratantes y antioxidantes que posee. Actualmente en Algabrava estamos trabajando en mejorar las técnicas de cultivo conocidas, tanto en mar abierto como en instalaciones indoor.
Cystoseira spp.
Son algas pardas pertenecientes al orden de los Fucales. Lamentablemente, debido primeramente a la contaminación de las aguas por excesos de nutrientes y actualmente debido a la destrucción del hábitat y a los efectos del cambio climático, las poblaciones de estas especies se han reducido drásticamente y en muchos lugares sólo quedan poblaciones aisladas y muy reducidas. Es por este motivo que las algas de los géneros Ericaria, Gongolaria y Cystoseira están protegidas por el Convenio de Barcelona y no se pueden recolectar del medio natural. Sin embargo, son especies que tienen un interés muy elevado para la industria nutracéutica y cosmética, debido a la gran cantidad de sustancias bioactivas que producen, entre las que destacan las fucoxantinas. Así pues, la cría y posterior cultivo de estas especies en instalaciones indoor y en el mar, permitiría aprovechar todo el potencial que poseen y a su vez, podría sustentar la restauración de las zonas marinas donde hayan desaparecido. En Algabrava estamos desarrollando sistemas extensivos para su cultivo.
Dasya spp.
Es una alga roja que tiene un gran interés tanto para la nutracéutica como para la cosmética. Esto es así ya que contiene grandes concentraciones de vitamina A y C, tiene un alto contenido en minerales (potasio, hierro y manganeso), tiene una alta concentración de fibra, proteínas, polifenoles y ácidos grasos poliinsaturados (omega 3), y contiene aminoácidos similares a las micosporinas (MMA). En Algabrava se han mantenido stocks de este alga durante dos años, produciendo biomasa para usar en distintos productos cosméticos.